

Historia

Tenemos el mejor motivo para dedicar todo nuestro tiempo, todo nuestro empeño y toda nuestra pasión a los niños y niñas : Nuestro hijo Luis David es uno de ellos.
La Fundación FIDEC inicia en el año 2000 en la ciudad de Valledupar, gracias a las familias CARO WAGNER y WAGNER MIETH, viendo la necesidad de apoyar a la comunidad vulnerable de la Región, donde inician asesorando proyectos de cooperación internacional, logrando realizar proyectos con la Gobernación del Cesar.
En el año 2002 nace Luis David en la ciudad de Valledupar, hijo del matrimonio conformado por Oscar Mauricio Caro Madero y Karyn Wagner Mieth, quien a los 4 meses tiene una recaída por bronquiolitis que lo llevo a tener paros respiratorios, estando por 20 días con respiración mecánica, de allí que, a los 8 meses de edad, el Neuropediatría diagnostica un retraso psicomotor en Luis David, remitiéndolo a sesiones de terapias física, ocupacional y fonoaudiología. Sin embargo, al pasar del tiempo no se generaban los resultados esperados, dando lugar que la fisiatra determina que Luis David no tiene opciones para vivir una vida activa sino por el contrario.
Es por tal diagnostico que sólo DIOS, lleva a su familia a evaluar a Luis David donde el Dr. Klaus Mieth Ortopedista en la ciudad de Bogotá, diagnosticando al niño con una Parálisis Cerebral, con opciones de mejorar su calidad de vida al transcurrir de los años, y desde allí que reinicia las terapias de física con Fernanda Arbeláez y controles en el Instituto Roosevelt con el Dr. José Luis Duplast.
A pesar de las situaciones ocurridas con Luis David en la familia, FIDEC continua y en el año 2006 se realiza un proyecto social de rehabilitación para niños en la Feria Ganadera de la ciudad, realizando terapias equinas apoyadas con terapias físicas, (hipoterapia) con la Caja de Compensación Comfacesar, para niños afiliados a ésta, generando un programa continuo hasta el año 2007.
En el año 2007, la Familia CARO WAGNER, toma la decisión de trasladarse a la ciudad de Barranquilla, y los médicos especialistas José Luis Duplat (Ortopedista) y Fernando Ortiz (fisiatra) evalúan el nivel de discapacidad de Luis David y mensualmente se trasladan a la ciudad de Bogotá al Instituto Roosevelt para realizar las terapias de rehabilitación con un equipo interdisciplinario, generando excelentes resultados en Luis David, mejorando las condiciones de vida en el niño y en la familia.
Es así que surge la idea de crear un lugar similar al Instituto donde se pudiesen atender niños doblemente vulnerables, con discapacidad y de bajos recursos, con una mejor accesibilidad a los tratamientos sin viajar a la ciudad de Bogotá, atendiéndolos un equipo médico interdisciplinario, competente y de excelente calidad humana.
Es así que en el año 2009, se abre el Centro de Rehabilitación Infantil “Luis David Caro Wagner” en el municipio de soledad, iniciando la prestación del servicio social en el tratamiento integral de rehabilitación con 5 niños del sector.
De allí que impulsados por el deseo de continuar apoyando la accesibilidad al servicio de salud de los menores doblemente vulnerables, en el año 2010 se realizan las primeras contrataciones con EPS, generando buenos resultados en el tratamiento del menor, logrando así el aumento en la prestación de los servicios durante el año 2011 y 2012.
Es así que desde el año 2013, al ver el crecimiento progresivo de la Institución, se da un giro administrativo, ingresando al Centro de Rehabilitación un equipo interdisciplinario administrativo y asistencial competente y con sentido de pertenencia para lograr que día a día
se trabaja para mejorar la calidad de vida de los niños y su entorno familiar, estableciendo objetivos que permitan un tratamiento integral social y de salud al menor con discapacidad cognitiva y neurológica.
Es por tal motivo, que en el año 2015 son impulsados para mejorar su infraestructura física, y se trasladan al municipio de Barranquilla, en una nueva sede de 620 mt2, que permite brindar un servicio con mayor amplitud, comodidad, acorde a la normatividad legal y con mayores beneficios para los pacientes, familiares y colaboradores.

Luis David,
Eres nuestro motor y mentor, nuestro motivo y nuestra guía; gracias por permitirnos crecer y ser, por darnos la oportunidad de ayudar a la causa justa: los niños.
Que Dios te llene de bendiciones,
Todo el equipo FIDEC